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sábado, 30 de marzo de 2019

Buenos días para celebrar que estamos de fin de semana, vamos a comentar una de las anécdotas de los hermanos Marx.

Tenían pensando rodar una última película que se llamaría “A Day at the United Nations”. 

Groucho y Gummo habían dado el visto nuevo a una nueva película. 

Goucho es el cabecilla de una banda de delincuentes que atracan Tiffany, por el despliegue que hace la policía por la reunión de las Naciones Unidas. 

Harpo es un experto en abrir todo tipo de cerraduras, menos las latas de sardinas. 

Chico es el matón de la banda. 

Roban las joyas y escapar por las alcantarillas hasta el puerto, para coger un barco hasta Brasil.

Pero hay un piquete comunista que lo impide. La policía los toma por una delegación de la ONU de Letonia (aún miembro de URSS). 

Los escolta hasta la embajada. Harpo da un discurso en el Las Naciones Unidas, mediante sus bocinas. El traductor de cada país traduce de forma distinta sus bocinazos . 

Wilder (director) declaró: “Queremos hacer una sátira sobre el deterioro de las relaciones diplomáticas, la política de la cuerda floja, chistes salvajes sobre la bomba atómica… 

Ese tipo de cosas”. Pero por problemas de salud de Chico y Harpo se descartó. 

Finalmente se adapto, y se rodó otra película “Uno, dos tres”, de 1961, con otro argumento pero con la Guerra Fría de telón de fondo. Y para terminar una frase de Groucho.


  “He disfrutado mucho de esta obra de teatro… especialmente en el descanso.”